Las facturas son dinero que se paga o se cobra. Por eso es el documento más delicado de un negocio y la seguridad debe acompañar todo su ciclo de vida. “Esta criticidad explica, que no justifica, los recelos y temores de las empresas colombianas a la hora de abordar un proyecto de factura electrónica”, comentaCarlos Velamazán, Director de la Unidad de Negocio América de SERES.
El impulso dado por la DIAN, con la entrada de la obligatoriedad de la factura electrónica, es un ejemplo más de que la facturación electrónica es un mecanismo que ha llegado a Colombia para quedarse, y cuya universalización será una realidad en un breve plazo. Sin embargo, este ritmo de adopción no es tan rápido como sería recomendable para modernizar la economía colombiana.
“La principal preocupación de las empresas –señala Velamazán– es garantizar la seguridad de su información. Algo que resulta bastante lógico, puesto que la factura electrónica es un documento con información de carácter sensible de las empresas. Por este motivo, la solución elegida para trabajar con factura electrónica debe de garantizar la seguridad en el intercambio de esta información”.
¿Cómo garantizar la seguridad en un proyecto de factura electrónica?
El desarrollo de la denominada “Comunidad Digital” (relación digital en los negocios) debe estar basado en la certeza para las empresas colombianas de que la solución elegida para facturar electrónicamente incorpore una tecnología y unos procedimientos que eliminen o minimicen los riesgos.
“En su naturaleza –indica Velamazán– la factura electrónica incorpora determinados elementos, como la firma electrónica, que permiten potenciar la autenticidad y la integridad de la información que contienen las facturas, sin embargo este nivel de seguridad puede ir más allá. En este sentido, los proveedores de factura electrónica, como es el caso de SERES, aportan la parte más relevante de la seguridad de estos documentos en los servicios que prestan”.
El proveedor de servicios de facturación electrónica tiene la obligación de cuidar la seguridad de los datos que los clientes le confieren para su tratamiento y distribución, “pero no todos ofrecen los mismos niveles y garantías de seguridad”, añade el Director de la Unidad de Negocio América de SERES.
Una pieza clave para ofrecer un ecosistema seguro es disponer de redes privadas, seguras y trazables, dentro de una infraestructura propia en todas las capas del servicio (hardware, software, comunicación…). A ellas se debe añadir la capacidad de ofrecer una vigilancia permanente de los niveles de seguridad (ej.: auditorías internas periódicas, atención a las alertas,...), incluso de los aspectos relacionados con la seguridad física. Cuando una empresa decide trabajar con un proveedor de factura electrónica, éste es quien tiene la responsabilidad de recibir, tratar y distribuir de forma segura los datos de los clientes y usuarios de los servicios que prestan.
Adicionalmente, la solución aportada por un proveedor de factura electrónica debe de ser compatible con las de sus clientes o proveedores sin que la seguridad se vea reducida. De ahí la necesidad de una seguridad que sea universal y que se base en la experiencia en prácticas tanto sectoriales como de mercado, llevada a cabo por proveedores de factura electrónica especialistas que llevan largo tiempo actuando en este campo.
“En SERES -concluye Velamazán- llevamos años aplicando importantes recursos y atención a la gestión de la seguridad en todas sus dimensiones. A medida que se extiende el uso de los medios electrónicos, esta necesidad es más patente, y seguirá ganando notoriedad. El desafío es continuo, y debe atenderse de manera permanente con nuevos, mayores y mejores niveles de seguridad”.
0 Comentarios
Deje su comentario