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La inversión estará enfocada en incrementar la capacidad productiva, la gestión del agua e innovaciones de algunas de sus plantas en el país.
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Estas nuevas inversiones refuerzan la confianza que tiene la compañía en Colombia, país que abastece a 14 mercados en Latinoamérica.
Bogotá, Colombia. enero de 2021. Kimberly-Clark cree en el potencial y crecimiento del mercado colombiano. Por esta razón, la compañía sigue enfocando sus esfuerzos en robustecer todas las capacidades del país para continuar produciendo y exportando sus productos a lo largo y ancho de Latinoamérica.
Uno de los planes más importantes de Kimberly-Clark es la inversión de cerca de 7.5 millones de dólares en el 2022 para su planta de Tocancipá, donde esta inversión estará enfocada en incrementar la capacidad productiva de la planta de Protección Femenina y en mejorar la infraestructura y optimizar las condiciones tecnológicas que permitan estar a la vanguardia con una planta de categoría mundial.
Así mismo, se estima una inversión de aproximadamente 23 millones de dólares para el 2022 en la planta de Papeles del Cauca, enfocados principalmente a optimizar e innovar en los procesos productivos, especialmente de las líneas de cuidado familiar y cuidado infantil.
“Durante más de 50 años, en Kimberly-Clark hemos ofrecido productos de la mejor calidad a nuestros consumidores en Colombia, estos planes llevarán la última tecnología de la compañía a nuestras operaciones locales para ofrecer nuevos productos e innovaciones, tanto a los colombianos como en toda la región”, mencionó Gustavo Castellanos, gerente general de Kimberly-Clark en Colombia.
Estas nuevas inversiones se suman a las realizadas en 2020 y 2021 que consistieron en la inversión de más de 80 millones de dólares, cerca de 280 mil millones de pesos, que realizó la compañía con el fin de fortalecer su capacidad de producción en Colombia, específicamente en las plantas de producción ubicadas en Puerto Tejada (Cauca), Tocancipá (Cundinamarca) y Barbosa (Antioquia).
Esta apuesta de Kimberly-Clark se traduce en una transformación tecnológica que está enfocada en aumentar la capacidad de producción de sus marcas, tanto para consumo interno del país, como para fortalecer las exportaciones y así continuar abasteciendo desde sus plantas a Argentina, Bolivia, Chile, Costa Rica, Ecuador, Guatemala, Honduras, Nicaragua, Panamá, Perú, Paraguay, El Salvador, Uruguay, Brasil y Puerto Rico.
“Colombia es un mercado líder para Kimberly-Clark, por eso estamos comprometidos a aportar a su crecimiento, confiando en su potencial como mercado y exportador. En la actualidad, la empresa produce más de 60 millones de pañales y más de 90 millones de productos de cuidado femenino al año; con las nuevas inversiones, la producción se fortalece y el país sigue destacándose en el abastecimiento de 14 mercados en Latinoamérica”, reafirmó Castellanos.
El impacto social y ambiental de Kimberly-Clark en Colombia
Es importante destacar la confianza que tiene la compañía en el potencial del mercado colombiano, no solo como un destino clave para sus productos, sino como promotor de talento, inclusión y equidad de género. En la actualidad, Kimberly-Clark Colombia emplea más de 1300 personas en sus plantas, centros de distribución y oficinas, y del total de posiciones de liderazgo dentro de la compañía en Colombia, el 44,6% son ocupadas por mujeres.
Así mismo, los objetivos establecidos por Kimberly-Clark para los próximos años tienen como finalidad seguir contribuyendo al bienestar de las personas en todas las etapas de la vida, a través de programas como ‘Baños Cambian Vidas’ que de la mano de Scott ha beneficiado a más de 10,300 personas en el departamento de Bolívar; ‘Un abrazo para cada bebé’ de Huggies, que en alianza con UNICEF ha beneficiado a más de 6.000 bebés y niños de poblaciones vulnerables; la alianza con el Banco de Alimentos en donde se han donado más de 1.250.000 Unidades de producto entre 2020 y 2021 y la alianza desde el 2006 con la Fundación Colombianitos que ha logrado promover el desarrollo de competencias socioemocionales de más de 22.000 niños, niñas y jóvenes de siete instituciones educativas públicas ubicadas en la áreas cercanas a sus plantas.
“Desde Kimberly-Clark contribuimos a la creación de un mundo mejor y creamos oportunidades en línea con el propósito de nuestras marcas y productos. Nuestra historia sigue creciendo y para nosotros es un honor saber que los productos esenciales que fabricamos aquí suplen las necesidades básicas de millones de consumidores en Latinoamérica, de una manera sostenible, y beneficiando a todas las poblaciones”, puntualizó Castellanos.
Fuente de redaccion Kimberly-Clark
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