Bogotá, Colombia abril de 2021-, El aprendizaje tradicional se encuentra en crisis, y la pandemia ha puesto en evidencia la necesidad de implementar estrategias para lograr una verdadera adquisición de conocimientos y desarrollar métodos que promuevan la innovación en educación.
Se estima que debido al COVID-19 la problemática educativa se acrecentó a nivel global, por lo que podría aumentar desde un 53% hasta un 63% el porcentaje de estudiantes afectados por la pobreza de aprendizajes en los países de ingreso bajo y mediano. Específicamente en Latinoamérica, tal situación podría significar una pérdida de hasta 1,7 billones de dólares, debido a la disminución de capital humano, calidad educativa y productividad.
Como respuesta a esta coyuntura se está promoviendo el aprendizaje sostenible en la región, el cual se basa en la aceptación y localización de los valores, habilidades y diferencias de cada uno de los alumnos para construir bases sólidas para el desarrollo integral del estudiante. De acuerdo con Blue Solutions, este tipo de aprendizaje abre la ventana de oportunidades para una educación inclusiva, equitativa y de calidad.
“El aprendizaje sostenible presenta una nueva forma de pensar y tomar decisiones en cuanto a las mejores formas de enseñanza inclusiva, brindando a los maestros una serie de modelos y herramientas para mirar, percibir, y tomar decisiones para entregar una educación de la mejor calidad, inclusiva para todos”, afirmó Andrea Palacios, CEO de Blue Solutions.
En este contexto cobran relevancia los maestros, quienes deben desarrollar un rol más activo, ya que deben inculcar conocimientos organizados, reflexivos y útiles para situaciones en el presente o en el futuro que puedan aplicarse más allá del aula de clases.
“El docente debe entender que, al utilizar el método de enseñanza sostenible, se está convirtiendo en un pilar fundamental del crecimiento del país y la región porque no solamente está formando alumnos, sino que también está formando mejores seres humanos. Este entendimiento tiene que darse de manera global y transversal en el sistema completo”, destacó Palacios.
En lugar de proporcionar conocimientos memorizados a corto plazo, de carácter estático, un aprendizaje sostenible ofrece conocimientos siempre circunscritos al contexto de uso, con ciertas características principales: deben ser conocimientos de orientación, dinámicos y transferibles. Esto se traduce en que las oportunidades de aprendizaje deben permitir a todos los estudiantes desarrollarse como aprendices independientes, capaces de enfrentar los retos futuros logrando el aprendizaje perdurable.
Panorama en Colombia
Según Blue Solutions, el gobierno colombiano, a través del Ministerio de Educación nombra constantemente este concepto, pero lo enfoca principalmente en temas ambientales y desarrollo de proyectos de capacitación para la conservación de fauna y flora. Sin embargo, es poco usual que se hable de educación sostenible como estilo de aprendizaje aplicado a la forma de vida y costumbres que perduran en el tiempo.
“Son muy pocas las instituciones que se interesan por desarrollar y fortalecer este modelo educativo, y por lo tanto hay un largo camino por recorrer y muchos avances que se pueden hacer en el corto, mediano y largo plazo para instaurar este tipo de educación en Colombia”, puntualizó Palacios.
En este sentido, Blue Solutions destaca la importancia de generar conciencia sobre la capacitación de los docentes en cuanto a aprendizaje sostenible y la necesidad de que los gobiernos inviertan en este tipo de medidas para avanzar en una educación más equitativa. Por este motivo, han realizado webinars para instituciones como la Universidad Santo Tomás y el Politécnico Colombiano Jaime Isaza Cadavid. Además, en mayo del presente año llevarán a cabo un piloto en la Guajira para motivar estas transformaciones y fomentar la implementación del aprendizaje sostenible.
Esto permitiría dar cumplimiento al ODS 4, en el que se manifiesta que cuando se reconocen las situaciones particulares, la diversidad deja de ser una barrera y comienza a ser una riqueza para el aprendizaje.
“Este es el mayor desafío: entregar la mejor calidad educativa para todos y cada uno de los estudiantes en Colombia, disminuir las brechas y ofrecer oportunidades para todos aquellos que necesitan adquirir conocimientos útiles en su vida diaria”, expresó Palacios.
Ecuador: país pionero en Latinoamérica
Actualmente, Ecuador es el país que más ha avanzado en cuanto a aprendizaje sostenible y, gracias a las iniciativas de la empresa ALATA, ha decidido adoptar este modelo de enseñanza importando conceptos de países como Australia, donde este tipo de aprendizaje es implementado en todas las esferas educativas y los resultados son palpables en aspectos académicos, sociales y económicos.
“Ecuador ha capacitado en esta materia a más de 10.000 docentes, con lo que se ha permitido llevar este enfoque a las escuelas, dotando a los profesores de herramientas y dando un giro con respecto a la inclusión, cambiando las prácticas de aula y mejorando espacios educativos para volverlos sostenibles”, manifestó Palacios.
En este país se han realizado varios planes piloto con los que se han beneficiado 9.127 estudiantes de pregrado, 115 docentes de universidades y 849 docentes de otras instituciones educativas. Además, en cooperación con otros países, se ha logrado concretar la firma de varios convenios para generar alianzas de cooperación con el fin de fortalecer la educación universitaria a través del enfoque del Aprendizaje Sostenible como el OMEP – Ecuador, CHISHOLM – Australia y el Convenio Andrés Bello– Lima Perú. Por su parte, la entidad ALATA, se encuentra desarrollando programas e intervenciones de educación inclusiva basados en la investigación de mejores prácticas internacionales.
“Estos avances demuestran que, aunque aún existe un largo camino, se están dando pasos que fomentarán que otros países se unan en pro de la calidad educativa y un mejor futuro para la región implementando el aprendizaje sostenible”, concluyó Placios.