Bogotá 4 de octubre
Surtido el primer foro de los 10 que definirán al candidato único del Centro Democrático, las cartas uribistas se mostraron los dientes.
Como era de esperarse, la candidata Fernanda Cabal mostró que cuenta con un apoyo evidente por parte de la colectividad; sin embargo -y para sorpresa de muchos- el exgobernador del Casanare Alirio Barrera dio el primer golpe de autoridad del ejercicio democrático que adelanta el uribismo.
El llanero, quien viajó desde Yopal con solo seis personas de su staff, (a diferencia de los demás precandidatos que abarrotaron el Salón Rojo) se llevó todos los aplausos y su salida del evento fue entre ríos de personas que pedían una foto, una cita o liderar alguna reunión para el precandidato por alguna parte del país.
Y es que el tema trascendió a las redes sociales, donde Barrera fue el más mencionado.
De hecho, horas antes, a través de un sondeo realizado por Argiro Castaño, uno de los twitteros más reconocidos del uribismo, se presentó lo que parece ser una fotografía del momento político en el interior del Centro Democrático de cara a la consulta de dicho partido.
Fueron al menos 31.800 votos los que arrojaron que la precandidata presidencial María Fernanda Cabal se ubica como favorita con un 52%, un resultado que parecía predecible por el ruido que ha generado en redes.
Lo que más llamó la atención fue que en el segundo lugar se ubicó el exgobernador de Casanare Josué Alirio Barrera, quien apenas se está ‘desempacando’ en la puja, con un 23%.
Pero ¿qué tiene este llanero de 44 años para ser ese candidato que empezó a cabalgar desbocado por el aval de su partido y que ya empezó a asustar a sus copartidarios?
De este candidato de sombrero se ha comentado mucho: que sería el caballo de Troya en el partido, que es la carta del expresidente Uribe y su hijo Tomás, en fin; lo único que se puede comprobar hasta hoy, es que este campesino goza de buena reputación tras haber gobernado el Casanare, que ha asegurado “no temer enfrentarse a los cacaos del uribismo” y que “tiene como ventaja frente a sus copartidarios el haber ya gobernado”.
Alirio es, según los simpatizantes del uribismo, es el único candidato que acerca al Centro Democrático con las necesidades del país, con el ciudadano de a pie; terreno que le urge a la derecha colombiana para acercarse a las masas y que hoy solo capitaliza el centro y la izquiera.
Su postura frente al proceso de paz, no ha caído bien entre sus copartidarios quienes critican todo lo acordado en La Habana, sin embargo, barrera señala que “Ya lo que fue, fue; no podemos seguir peleando por los acuerdos y lamentar lo que pasó, vamos es a arreglar lo que pueda arreglarse. El Estado debe garantizar los derechos para todos los actores del conflicto, especialmente las víctimas civiles , la fuerza pública y las fuerzas militares” señaló el campesino en el foro.
Gustó también en su discurso que no le interesa dividir, por el contario busca unir al país en la equidad. “La falta de oportunidades es la incubadora más grande de la delincuencia del país” sugirió Barrera.
Frente a los otros precandidatos, el exgobernador brilló por su discurso dedicado al agro, y cómo no si sus orígenes son de campo y conoce la situación de los productores colombianos.
Pero sin duda, lo que más llama la atención de este campesino nacido en Monterralo, una vereda de Aguazul -Casanare, es su origen humilde, pues nació en la pobreza extrema; creció en las calles y a pesar de no haberse formado profesional, fue calificado en tres ocasiones como el mejor gobernador del país en la vigencia anterior. De momento, cursa tercer semestre de administración de empresas y su historia de superación aún no ha dejado de escribirse.
Fuente de redaccion Centro Democrático