LO QUE SE INTERPONE EN EL CAMINO DE LAS MUJERES EN EL CAMPO DE LA CIENCIA, TECNOLOGÍA, INGENIERÍA Y MATEMÁTICAS EN COLOMBIA

Mar 28, 2022 - by administrador

Bogotá, 28 de marzo de 2022. En Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas también  conocidas como áreas STEM (por sus siglas en inglés) las mujeres enfrentan barreras y  desigualdades estructurales. “Si se suman las nuevas dificultades a las estadísticas  tradicionales que señalan que más del 50% de las mujeres en carreras STEM se retiran en  los primeros 12 años frente al 20% de las que trabajan en carreras no STEM, tenemos una  situación que se debe convertir en un foco de atención tanto para los distintos gobiernos  como para el sector empresarial global”, afirma la Dra. Bilita Mattes, Vicerrectora  Académica de Harrisburg University

Para la Dra. Mattes el ámbito empresarial se ha vuelto cada vez más innovador y  competitivo. Hoy en día, más del 70% de los trabajos requieren algún nivel de habilidades  STEM. “Es fundamental que las mujeres cuenten con el apoyo necesario para alcanzar su  desarrollo dentro de este espacio, pues la paridad de género por sí sola puede agregar más  de $12 billones a la economía global”, agrega la catedrática. 

Según el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación de Colombia, se evidencia una  brecha persistente entre las mujeres que se dedican a la ciencia, la tecnología y la  innovación frente a los hombres: Para 2019 de 16.796 investigadores, 6.411 son mujeres,  lo que se traduce en que son solo el 38%. 

De la misma forma el Centro de Pensamiento para el fortalecimiento de liderazgo y  empoderamiento de la mujer colombiana STEM, menciona que por ejemplo la planta  docente de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional, la más grande del país,  cuenta con 32 mujeres docentes frente a 246 hombres en su sede de Bogotá; o que hasta  2018 fue designada por primera vez una mujer decana en la Facultad de Minas en sus 131  años de historia.

Como este hay muchos ejemplos de brechas de desigualdad de género en estas áreas, aún  así, mujeres STEM han estado liderando la investigación sobre el COVID-19, creando  rastreadores y desarrollando vacunas, según explica la Dra. Mattes. 

Aunque las mujeres también representan el 70% de los trabajadores de la salud y los  socorristas del mundo, la pandemia influyó negativamente en los avances logrados por ellas  en el sector. Antes de la pandemia el 50% de la fuerza laboral la representaban mujeres,  porcentaje que disminuyó por las más de 5.4 millones de plazas de trabajo que se perdieron  desde el inicio de la pandemia, según lo indica la Comisión Económica para América Latina  y el Caribe - CEPAL. 

La Dra Mattes, quien también es directora ejecutiva de la Red STEM-UP, comunidad  impulsada por Harrisburg University, apoya a las mujeres profesionales STEM, a través de  estrategias para avanzar y prosperar personal y profesionalmente. La red también busca  establecer un vínculo efectivo entre las mujeres y el sector empresarial a través de un  networking, que se enfoca en la verdadera diversidad e inclusión en los distintos ámbitos  de la sociedad. 

Para la Dra. Mattes son claros los puntos que se deben trabajar para mejorar la situación  de las mujeres profesionales STEM, para motivar a muchas otras a seguir este camino. Existe  un sesgo implícito y manifiesto con el cual se debe lidiar, conocido como el fenómeno de la  discriminación vertical, el cual evidencia que las mujeres son asignadas a puestos más bajos  en la jerarquía científica mientras que los hombres ocupan los más altos cargos. 

Aun cuando existen mujeres destacadas en el área científica, estas representan un mínimo  porcentaje que no logra ser tan relevante. Por lo tanto, otra batalla importante es lograr un  verdadero impacto social a través de modelos de liderazgo femenino en las profesiones  STEM que se vuelvan visibles para muchos más sectores de la sociedad. 

Se requiere también de una mayor intencionalidad educativa que contribuya con una mejor  calidad de educación científica. En este sentido, es clave el compromiso gubernamental con  el desarrollo de políticas de Estado que permitan el avance de las ciencias. 

En Colombia, algunas de las personas que se preparan con doctorados fuera del país, a su  regreso se encuentran con que están sobrecalificados por las empresas y las ofertas de  trabajo no se ajustan a sus perfiles, es decir, no basta solo con una buena preparación, sino  que las políticas públicas deben ir encaminadas a mantener buenos perfiles en el país. El  científico en ScienteLab, Bryann Avendaño Uribe, en sus entrevistas y presentaciones  manifiesta que si bien se necesitan más mujeres y profesionales en los campos STEM, no se  ve reflejado en el actual panorama para los científicos en Colombia.

Aparte de los puntos abordados, existen también otros obstáculos como la falta de  mentores y redes de apoyo, la falta de flexibilidad en los modelos de trabajo, la sensación  desmoralizante de aislamiento o no pertenencia, el cuestionamiento a los logros y la poca  valoración de los mismos y el acoso y microagresiones que siempre ha existido en este y  otros campos profesionales. 

Ante este panorama, la Dra. Mattes recuerda el compromiso que Harrisburg University, a  través de su Red STEM-UP, tiene con las mujeres científicas latinoamericanas al acercar esta  comunidad a los países de la región para recibir la mentoría que las profesionales en ciencias  necesitan. Generar una verdadera colaboración entre pares y ofrecer programas y  herramientas que contribuyan al liderazgo entre las mujeres de ciencia es la clave para  alcanzar el desarrollo. 

 

Acerca de Harrisburg University: La Universidad de Harrisburg, acreditada por la Comisión  de Educación Superior de Middle States, es una universidad privada sin fines de lucro que  ofrece programas de licenciatura, posgrado y doctorado en los campos de la ciencia, la  tecnología y las matemáticas. Ahora más cerca de la región latinoamericana, Harrisburg  University abrió su nueva sede en Ciudad de Panamá. Para más información:  https://www.harrisburgu.edu/hulatam/ 

FUente de redaccion Harrisburg University