La “niñera digital” puede ser su aliado siempre y cuando aprenda a poner límites y controle su manejo. Esto dicen los expertos

Sep 26, 2024 - by administrador

Mucho se ha hablado acerca del uso permanente de la tecnología desde una corta
edad. De hecho, hay quienes afirman, y con aparente razón, que el manejo excesivo
de pantallas genera bajo rendimiento académico, aumenta el sedentarismo y causa
perjuicios en la salud visual y en el desarrollo cognitivo.
Previendo esta situación, los psicólogos infantiles, entre otros analistas,
recomiendan poner límites para la manipulación de celulares, computadores y otros
dispositivos; asimismo, aconsejan hacer una mayor supervisión con el fin de evitar
situaciones que puedan poner en riesgo a los menores.
Sin embargo, Harold Álvarez Campos, docente de la Especialización en
Informática para la Innovación Educativa de Areandina, sede Bogotá, señala
que no se debe olvidar son los adultos (padres de familia, demás familiares
responsables o cuidadores) los primeros que deben usar la tecnología de manera
adecuada. “Los niños ven este ritmo frenesí de consumo digital e interactúan con
pantallas, en ocasiones, más de lo que se debe. En otras palabras, somos los
primeros que debemos dar ejemplo”.
Álvarez agrega que, si bien las amenazas en el contexto digital son cada día más
evidentes y elaboradas, también es cierto que la tecnología ofrece grandes ventajas
y beneficios, y no se trata de satanizarla.
“Lo que tenemos que responder es cuánto tiempo debemos permitir a nuestros hijos,
nietos o sobrinos estar frente a diferentes dispositivos, pues no se trata de prohibir
su uso, se trata de enseñar y generar buenos hábitos de consumo”, señala Álvarez,
quien además agrega que en este sentido “los adultos nos debemos ubicar en dos
escenarios distintos: uno, que contiene las cosas positivas que ofrece el mundo
digital; y dos, los aspectos negativos que genera su mal uso debido a una
inadecuada supervisión”.  
Al respecto, el docente de Areandina hace tres precisiones sobre lo bueno que tiene
la tecnología, sobre todo el impacto que esta genera en el proceso de educación y
formación de los niños.
1. La internet les permite disfrutar de una amplia gama de información y conocer
recursos educativos en línea, lo que enriquece su aprendizaje y desarrollo cognitivo.
2. El mundo digital les proporciona oportunidades de formación en línea a través
de diferentes plataformas virtuales, tutoriales y cursos, que amplían su acceso al
conocimiento, sin importar las distancias ni las barreras socioeconómicas,
enriqueciendo a su vez sus habilidades tecnológicas.
 
3. Los dispositivos, como celulares, tabletas y computadores, les ayudan a
mantenerse conectados con familiares, amigos y compañeros de estudio, por medio
de las redes sociales, aplicaciones como WhatsApp y demás programas de
mensajería que permiten hacer videollamadas. Estas herramientas, tan criticadas
hoy en día, no son malas por naturaleza, lo negativo es el uso que se les está
dando.
Igualmente, de acuerdo con Álvarez, no se puede desconocer que la tecnología, sin
un buen manejo, puede generar también serias dificultades, sobre todo si los niños
aún tienen una corta edad.
Por eso invita a los padres, familiares y cuidadores, entre otros, a tener en cuenta los
siguientes tres aspectos:
Primero, es clave conocer y revisar los riegos en línea, “pues el uso constante de la
internet puede exponer a los chicos a ingresar a sitios pornográficos o violentos en
exceso, entre otros, que los puede llevar a ser fácilmente víctimas de ciberacoso y
robo de identidad”, indica.
Segundo, si no se promueven desde casa buenos hábitos de consumo, la tecnología
genera rápidamente dependencia y adicción a dispositivos electrónicos. “Esto puede
afectar negativamente su salud mental, bienestar emocional y el desarrollo de
habilidades sociales”, advierte Álvarez.
Tercero, es fundamental saber que, entre más tiempo permanezcan conectados los
niños al mundo digital, más se favorece su sedentarismo, ocasionando preocupantes
daños en su salud, como sobre peso, riesgo de presentar diabetes y otras
enfermedades cardiovasculares. “En ningún momento podemos permitir que “la
niñera digital” reemplace las actividades al aire libre, el ejercicio físico fuera de línea,
como el juego al aire libre, el ejercicio físico, la lectura y otras dinámicas sociales y
recreativas”, concluye.
Relación con medios: Andrés Vera / El Conserje Marketing de Opinión / Cel.