En la actualidad de la era digital, donde la información se ha convertido en un activo invaluable, la implementación exitosa de la gobernanza de datos se ha vuelto un elemento crítico para el éxito organizacional. La implementación exitosa de esta estrategia, requiere una planificación meticulosa y la consideración de varios factores. En primer lugar, es esencial establecer una política clara que defina los roles y responsabilidades de las partes involucradas, así como los procedimientos a implementar. Además, se deben establecer métricas de éxito alineadas con los objetivos estratégicos y garantizar la disponibilidad de recursos adecuados, incluyendo un equipo capacitado y responsable.
La gobernanza de datos tradicional se ha centrado principalmente en aspectos técnicos y regulatorios, descuidando la dimensión humana. Sin embargo, un enfoque activo y centrado en las personas puede marcar la diferencia en el éxito de la iniciativa y generar un mayor impacto en el negocio. Esto se logra teniendo en cuenta las siguientes cinco claves:
1. Enfoque colaborativo donde se promueva la participación activa de todas las áreas del negocio en la gestión de datos, desde la recolección hasta el análisis y la toma de decisiones.
2. Capacitación y desarrollo de habilidades para que los empleados puedan acceder, comprender y utilizar los datos de manera efectiva en su trabajo diario.
3. Comunicación y transparencia para compartir las políticas, procedimientos y objetivos de manera clara y accesible para todos los empleados.
4. Liderazgo y apoyo como una prioridad estratégica de la compañía.
5. Medición y evaluación con unas métricas para evaluar el impacto en el negocio.
La implementación de una estrategia de un gobierno de datos tiene un impacto significativo en el rendimiento y la generación de valor de un negocio. Por un lado, aumenta las medidas de seguridad para proteger los datos confidenciales de la empresa y los clientes, reduciendo así el riesgo de violación de información y sanciones legales y, por otro lado, garantiza que los usuarios tengan acceso a la información adecuada, lo que evita la fuga de información, mejora la toma de decisiones y del tiempo de respuesta encontrando así, eficiencias en la operación.
Implementar Data Governance puede enfrentar varios desafíos, como la falta de recursos adecuados, la resistencia al cambio por parte de los empleados y la falta de infraestructura tecnológica robusta. Sin embargo, estos desafíos pueden superarse con una planeación adecuada, comunicación efectiva, liderazgo fuerte y un enfoque centrado en las personas. Además, es fundamental establecer métricas claras para medir el impacto y realizar ajustes cuando sea necesario.
Indudablemente, las empresas latinoamericanas muestran un gran interés en adoptar un enfoque basado en datos y aprovechar al máximo su potencial, pero enfrentan barreras. La falta de comprensión analítica entre los líderes es un obstáculo. Capacitar a los directivos es crucial para que entiendan cómo tomar decisiones basadas en datos y los beneficios asociados. De lo contrario, podrían malgastar recursos en soluciones tecnológicas sin objetivos claros.
En definitiva, la gobernanza de datos se erige como un pilar fundamental en la estrategia empresarial moderna, permitiendo a las organizaciones navegar con éxito en el vasto océano de información y convertirla en un activo valioso que impulsa el crecimiento y la innovación.
Fuente de redacción: Juan David Ardila, Sales Director en Keyrus