Bogotá D.C., 12 de diciembre de 2024. La mesa de crisis constituida por los movimientos sociales Pacientes Colombia, Pacientes Alto Costo, la Federación Colombiana de Enfermedades Raras (FECOER), el Observatorio Interinstitucional de Enfermedades Huérfanas (ENHU), mesas de asociaciones de usuarios y las sociedades científicas, colegios de profesionales de la salud y agremiaciones de IPS expresan su profunda preocupación por la grave crisis que enfrenta el sistema de salud, exacerbada por problemas que se agudizaron el último año y que han sido desatendidos por el Gobierno nacional.

Para las organizaciones, las tres situaciones principales que están llevando al sistema de salud a un punto crítico, si no se toman acciones inmediatas y concretas son: el incremento en las barreras de acceso que pueden provocar daños irreversibles en los pacientes, la crisis financiera en aumento y la afectación en las condiciones laborales del talento humano que comprometen su estabilidad laboral. Todo esto se traduce en una crisis humanitaria en Colombia y riesgo inminente para la vida de los pacientes.

Por eso, convocaron a un plantón frente al Cementerio Central en Bogotá el jueves 12 de diciembre a las 9:00 a.m.

Balance en rojo:

1.     Riesgo en la vida de los pacientes.

Se observa un alarmante aumento en las barreras de acceso, que impacta negativamente la prestación de servicios y el suministro y continuidad de tratamientos. Esto se refleja en la pérdida de vidas y un notable incremento en las quejas presentadas ante la Superintendencia Nacional de Salud, así como en el número de tutelas interpuestas en el último año. Cifras demuestran un crecimiento de 36,82 % en las quejas recibidas por la Superintendencia en octubre de 2024 en relación con las recibidas en el mismo período del 2023.

Principales efectos en los pacientes:

•       Negación de servicios médicos y de atención urgente.

•       Cancelación y reprogramación de procedimientos y tratamientos esenciales, debido a la falta de pago oportuno a las IPS, lo que genera un daño irreparable en la vida de los pacientes.

•       Demora y no entrega de medicamentos, ocasionado por deudas acumuladas con proveedores.

•       Demoras en la atención generadas por la falta de recursos, con instituciones públicas y privadas reportando sobrecarga operativa.

2.     Crisis financiera: un sistema al borde del colapso

La crisis se caracteriza por un déficit estructural y recortes fiscales, lo que no solo compromete la sostenibilidad financiera del sistema, sino que también amenaza gravemente la garantía de acceso oportuno y efectivo a los servicios de salud para toda la población. El abandono del Gobierno nacional sobre los siguientes aspectos agrava la situación:

•       Déficit presupuestal persistente: los recursos asignados son insuficientes para cubrir las obligaciones básicas, perpetuando las deudas históricas.

•       Recortes fiscales: el Gobierno nacional tendrá $74,1 billones menos de lo proyectado para 2024, según el Comité Autónomo de la Regla Fiscal, limitando aún más la capacidad de financiar el sistema.

•       Ausencia de seguimiento del giro directo: a seis meses de expedirse el Decreto 489 que ordena implementar un instrumento técnico para supervisar los recursos, el mecanismo no ha sido desarrollado, agravando los problemas de liquidez.

•       Atraso en pagos a los prestadores: el aumento en los días de rotación de cartera de las IPS pasó de 139 días en el 2022 a 151 días en el 2023, de acuerdo con información de la ANDI.

•       Deuda en aumento: cifras presentadas por la ACHC evidencian que la deuda pasó de 16,8 billones de pesos en diciembre de 2023 a 18,9 billones de pesos en junio de 2024, un aumento de 2,1 billones de pesos en solo seis meses.

3.     Talento humano en salud en alerta

La falta de condiciones laborales dignas para los trabajadores de la salud ha sido un tema recurrente y en aumento. Un sondeo realizado por el colectivo Acuerdos Fundamentales revela que más del 60 % de los profesionales de la salud padecen problemas físicos y mentales debido al deterioro de sus condiciones laborales.

Problemas evidentes:

•       Atrasos en los pagos: los profesionales de la salud continúan trabajando sin recibir su salario o sus honorarios de manera oportuna, acumulando meses de retrasos.

•       Falta de insumos esenciales: la precariedad en los recursos afecta la capacidad de los profesionales para brindar atención segura y de calidad.

•       Desgaste emocional y físico: la incertidumbre laboral y la sobrecarga operativa tienen un impacto negativo en la salud mental y bienestar del personal de salud.

Peticiones al Gobierno Nacional, Ministerio de Salud, Superintendencia Nacional de Salud y Adres:

Los pacientes, talento humano en salud y prestadores, estamos dispuestos a apoyar las posibles soluciones a esta crisis, pero instamos al Gobierno a proponer e implementar con prioridad las medidas necesarias para mitigar los daños. Es urgente que el Gobierno Nacional asuma su responsabilidad y actúe con determinación para garantizar el derecho fundamental a la salud de todos los colombianos.

1.     Análisis y búsqueda conjunta de soluciones concretas: medidas que garanticen la viabilidad financiera, el cumplimiento de los derechos a la salud y la dignidad de los trabajadores de la salud.

2.     Fortalecimiento de la atención: garantizar la continuidad en la prestación y suministro de medicamentos.

3.     Protección al talento humano en salud: estrategias que aseguren el pago puntual de salarios, condiciones laborales dignas y bienestar integral.