La Asociación tiene un reporte del primer trimestre de 2022 que indica que la región de América Latina enfrenta un escenario complejo, marcado por la desaceleración económica, presiones inflacionarias sostenidas y volatilidad. En 2021, LatAm creció 6,7% pero no logró recuperar los niveles pre pandemia. El rebote ocurrió en un contexto de importantes asimetrías entre los países, algunos de ellos como Chile, Paraguay, Colombia, Perú y Brasil recuperaron, en 2021, los niveles de 2019 del PIB.
Para 2022, se prevé una desaceleración: LatAm crecerá sólo la cuarta parte de lo avanzado en 2021. El conflicto armado entre Rusia y Ucrania ha generado una escalada generalizada en los precios de commodities, datos indican un aumento de 23,6% en soja, 34% en maíz, 138% en trigo, 99% en gas natural de Europa. En volúmenes, la producción de los sectores demandantes de acero está altamente concentrada en Brasil y México, de 83 mil toneladas de acero en 2021, Brasil utilizó cerca de 45 mil y México 24.
En Colombia, se profundiza la fragmentación del escenario política de cara a las elecciones presidenciales. La demanda de acero en el país creció 2,7% en la construcción, 20% en mecánica, 23% en uso doméstico y 5,7% en energía. Para 2022, el país espera moderación de la demanda de todos los sectores.
Para hablar del tema en el país, pongo a disposición para entrevistas Alejandro Wagner, el director ejecutivo de Alacero. Además, el ejecutivo también puede hablar del impacto de la guerra de Ucrania y Rusia y de las elecciones en los determinados países.