Los futuros conductores imaginan que sus autos actuarán como "teléfonos inteligentes sobre ruedas" que les permitirán ver películas, leer libros electrónicos y conectarse sin problemas a sus dispositivos móviles. Sin embargo, los verdaderos beneficios de los automóviles conectados son mucho más profundos. Se estima que los automóviles conectados podrían prevenir 10.000 muertes y alrededor de 500.000 lesiones solamente en los EE. UU. Esto se debe principalmente a los datos que generan, que maximizan la seguridad al proporcionar información valiosa tanto del automóvil: rastrea a otros usuarios de la carretera, detecta fallas del vehículo y al conductor, su ubicación, historial de conducción y hábitos de uso.
Sin embargo, con estos beneficios vienen inmensos desafíos y una estrategia de interconexión es esencial para enfrentarlos de frente.
Desafíos para la conectividad
Los automóviles conectados utilizan grandes cantidades de datos. En solo una hora, un automóvil conectado cargará 25 GB / datos a la nube, superando la capacidad de almacenamiento de la mayoría de los teléfonos inteligentes modernos e igualando aproximadamente 12 películas HD. En total, se usarán alrededor de 4.000 GB / datos por día. Para poner esto en contexto, un hospital inteligente usará alrededor de 3.000 GB.
Como resultado, una preocupación importante en torno a los automóviles conectados es la seguridad cibernética. Recientemente, los piratas informáticos explotaron el software Fiat Chrysler Automobiles Uconnect para controlar de forma inalámbrica un Jeep, desactivando su motor y se rompe, provocando que se bloquee. De manera preocupante, hay alrededor de 100 unidades de control eléctrico y más de 100 millones de líneas de código en los automóviles de hoy que provienen de varios proveedores para que ninguna persona u organización individual controle el código fuente del vehículo. Sin embargo, los servicios de seguridad en la nube a menudo pueden encontrar y reparar las amenazas antes de que puedan infiltrarse en el vehículo al tiempo que facilitan actualizaciones e inteligencia en tiempo real.
El sector de seguros es un excelente ejemplo en el que los automóviles conectados ya han forjado cambios. El error humano se atribuye al 90% de los accidentes automovilísticos, a medida que disminuye el riesgo de accidentes, también lo hace la necesidad de un seguro. Como tal, muchas aseguradoras están mitigando esta amenaza calculando el riesgo utilizando datos sobre dónde, cuándo y cómo conduce en lugar de un modelo basado en la experiencia. Por lo tanto, la industria se basa en datos precisos de cuadros telemáticos para determinar las primas. Los debates ya están en plena marcha en cuanto a si estos datos deben almacenarse en la nube. Si es así, ¿qué presión ejercerá sobre nuestra infraestructura digital, y podemos hacer frente a los requisitos de datos?
Habilitación de un nuevo tipo de demanda de datos a través de la interconexión
El hecho de que los automóviles viajen agrega una capa adicional de complejidad a medida que se expanden y redefinen constantemente los límites de la red. Es importante para la seguridad del usuario que los automóviles conectados permanezcan conectados en estos bordes digitales, para que los conductores puedan seguir recibiendo alertas sobre peligros inmediatos y consejos sobre rutas más seguras. Esto es algo que las infraestructuras de TI fijas y aisladas no pueden garantizar, ya que su diseño impide la recopilación y el procesamiento de grandes volúmenes de grandes datos y no pueden facilitar el estiramiento de las áreas de red.
Para garantizar el futuro exitoso del automóvil conectado, debemos asegurarnos de que los centros de datos estén equipados para hacer frente a un nuevo tipo de demanda de datos. Tendrán que poder:
Priorizar y reaccionar a los datos en tiempo real.
Evite la Internet pública, para garantizar que los datos personales sobre la ubicación y el movimiento se almacenen y analicen en un entorno seguro.
Asegure una conexión continua de alto rendimiento para acceder a nubes, redes y socios, ya sea que un vehículo viaje en Londres o Río de Janeiro.
Los fabricantes de automóviles requieren IoT y estrategias y arquitectura de big data que brinden capacidades de TI e interconexión distribuidas globalmente para la captura de datos en tiempo real. Los centros de datos como Equinix brindan servicios de colocación e interconexión global estratégicamente ubicados que satisfacen estas necesidades. Pueden recopilar, almacenar, procesar y analizar datos al mismo tiempo que permiten a las empresas, redes y proveedores de la nube acceder a ellos de forma segura. De manera crucial, pueden garantizar que el borde digital esté disponible 24/7 en cualquier ubicación a través de la colaboración de la nube, la movilidad y el IoT, lo que reduce la latencia y mejora la experiencia del usuario.
Por: Redacción COMPASS