En la actualidad, solo hace falta escribir “botnet”, “hacking”, “DDoS”, “CVV2” o cualquier otro término relacionado con el cibercrimen en la barra de búsqueda de la mayoría de las plataformas de redes sociales para descubrir una enorme cantidad de actividades fraudulentas que suceden a plena vista. Como RSA informó este año, las redes sociales se convirtieron en un ambiente ideal para las actividades relacionadas con el cibercrimen y atraen a los estafadores de todo el mundo que desean aprovechar estas plataformas porque son gratuitas y fáciles de usar, y ofrecen un alcance global.