Muchos consumidores y empresas utilizan todavía sistemas operativos (SO) que se han quedado sin soporte o que están cerca del final de su vida útil, según una investigación de Kaspersky. A pesar de que existen versiones más recientes, alrededor del 41% de los consumidores sigue utilizando SO sin soporte o en la recta final de su vida útil, como Windows XP o Windows 7. Al mismo tiempo, el 40% de las Microempresas (PME) y el 48% de las PYMES y Empresas siguen dependiendo de estos sistemas. Esta situación supone un riesgo para la seguridad.