Bogotá, marzo 24 de 2020. El Barómetro de Éxito en la Nube de Unisys nos muestra que los bancos y demás entidades financieras en Latinoamérica están más abiertos a la nube. El debate de migrar o no migrar ha sido superado, ya que los bancos concluyen que los beneficios son reales, contundentes e inmediatos.
Eso porque después de profundos análisis, nuevas regulaciones y evidencias de resultados positivos en otras industrias, han decidido avanzar y aprovechar las ventajas que la nube trae para su negocio. Pero, ¿por qué solo ahora?, les traigo datos para argumentar.
La seguridad que fue antes cuestionada, ahora es el elemento más destacado, por lo cual alojar información en la nube es más seguro frente a ciberataques, optimizando inversiones y dejando en manos expertas el control y la protección de los datos. Asimismo, hay evidencias sobre el aumento en la productividad, agilidad y competitividad para hacer frente a las necesidades y cambios que demanda la evolución digital en la banca. Todo lo anterior se refuerza por la capacidad de reducir costos, generar nuevos ingresos y proveer la flexibilidad necesaria para avanzar hacia la integración con terceros, aprovechando las ventajas que trae el Open Banking.
Además, la regulación que fue el freno para la apropiación de nuevas tecnologías y prácticas en la industria, ahora avanza en la mayoría de los países de la región permitiendo sacar ventaja de los servicios en nube, pero exigiendo los controles y protección de la información necesarios para evitar riesgos que impacten al consumidor, a la entidad y al sistema financiero, por lo que es necesario que los bancos se preparen y exijan a sus partners tecnológicos el cumplimiento de estándares globales – como pueden ser los ISO 27001, 27017 y 27018 –, gestionar los riesgos de las APIs o web services, contar con un respaldo adecuado y oportuno ante contingencias, proteger la información haciendo que esta solo sea visible, accesible y legible para quienes estén autorizados a usarla, contener ataques y garantizar el cumplimientos de las normas relacionadas con la protección de datos personales, que ahora se convierte en una preocupación global que trasciende a la industria, pero donde la banca juega un papel fundamental al ser un usuario y generador de data sensible y confidencial.
Bueno, todas esas son razones para que nos quedemos optimistas de que nuestras instituciones financieras están atentas a la transformación digital para atender mejor a sus clientes y empleados, desarrollando todo el mercado.
Piensen en un paisaje más o menos así: la adopción de los servicios en la nube consolidándose en la región en los próximos años, abriendo mayores posibilidades a la integración con fintechs y otros actores de la industria, contribuyendo a la transformación digital de la banca y brindando nuevas oportunidades que redefinirán la banca con mayor eficiencia, seguridad y nuevos servicios para sus clientes.
¡Me parece bueno! ¿Y a ustedes?
Por: Redacción Por Jorge Gómez
Experto en Industria Financiera de Unisys