Seis dimensiones clave para el trabajo digital

Abr 03, 2020 - by administrador

El COVID-19 se ha convertido en una crisis global, evolucionando a una velocidad y escala sin precedentes. Está creando un imperativo universal para que los gobiernos y las organizaciones tomen medidas inmediatas para proteger a las personas.

 

En este clima de crisis, sus decisiones no sólo determinarán la forma de operar a corto plazo, sino que también influirán significativamente en la forma de operar en el futuro. Los líderes inteligentes aprovecharán esta oportunidad para actuar rápida y navegar por la crisis a fin de evitar la disrupción de sus negocios y la posible pérdida de ingresos.

 

Uno de los primeros pasos de muchas organizaciones ha sido impulsar el teletrabajo a escala. Por eso, en su estudio Productividad en tiempos de incertidumbre: hacia un entorno de trabajo digital flexible

 

Accenture destaca las seis dimensiones clave para lograr una transición exitosa:

 

 

  1. Cultura y sensibilización: Proveer optimizaciones tecnológicas y de entorno laboral para permitir un trabajo remoto efectivo y activar un plan de comunicaciones que entregue guías sobre las políticas tanto externas como internas.  Para muchas compañías el trabajo remoto es un cambio de paradigma que puede tomar tiempo en ser adoptado. En esos casos es crítico que se les entregue a los líderes las herramientas y el coaching para ayudarlos a crear el entorno adecuado para testear y aprender, así como para ayudar a las personas adaptarse rápidamente a las nuevas formas de trabajar.

 

  1. Colaboración elástica: Rápidamente desplegar herramientas de colaboración a través de la organización para construir puentes con los consumidores, socios y proveedores. Para esto es necesario adoptar y medir la colaboración: desde hoy, se deben expandir las capacidades de colaboración y comunicación para proveer la cobertura a gran escala de los empleados. Impulsar soluciones basadas en SaaS, como Microsoft Office 365, Google G-Suite, Connect, WebEx y Zoom.

 

  1. Entorno de trabajo virtual: Evaluar la red de las empresas, acelerar el despliegue de dispositivos y potenciar los entornos virtuales para apoyar una demanda móvil creciente. En este punto se debe dar prioridad a la habilitación de los trabajadores que tienen funciones críticas en la conducción de la empresa, asegurando que tengan las herramientas y el acceso que necesitan.

 

  1. Networking fluido: Trabajar de forma productiva desde el hogar u otras locaciones remotas requiere de una conectividad fluida, segura y fiable en las redes corporativas, los activos de Cloud, y con los socios estratégicos. Se debe a asegurar la capacidad de la Red Privada Virtual (VPN) y proporcionar una orientación clara y prescriptiva a los empleados sobre opciones y paquetes de conectividad en redes remotas y domésticas.

 

  1. Continuidad distribuida: Mejorar los planes de continuidad de la empresa, incluyendo los escenarios de restricciones en los viajes y situaciones de teletrabajo a largo plazo. Incorporar la planificación para la pandemia en sus planes de continuidad de negocio, que es similar a la planificación para eventos climáticos catastróficos. Ejecutar a escala completa pruebas de continuidad humanas y de departamentos.

 

  1. Seguridad adaptada: Generar procesos para situaciones excepcionales, ampliar el enfoque de acceso a la red confiable y automatizar la detección y respuesta. Una acción clave para tener en cuenta en este punto es desarrollar rápidamente un modelo Zero Trust construido con base en tecnologías que permitan un acceso seguro, sin confiar en soluciones tradicionales VPN.

 

Redacción por: Accenture