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En América Latina, por ejemplo, la presencia en estos cargos ha ido en aumento, pero todo no ha sido fácil, pues aunque el mundo se está transformando en reconocimiento a la mujer, los retos a los que se enfrenta todavía son muchos. Según un estudio reciente de LinkedIn, entre 2006 y 2016, la presencia femenina en cargos de responsabilidad en la industria tecnológica mundial aumentó en un 18%, lo que ha venido acompañado también de un aumento en las contrataciones para puestos técnicos en general: directoras de tecnología (CTO) (60%) y desarrolladoras de sitios web (43%). Es una realidad que cada vez más la industria tecnológica necesita de ellas y del talento que aportan. En esta ocasión, y en celebración del Día Internacional de la Mujer, que es reconocido en todo el mundo y se celebra el 8 de marzo, nos acercamos a seis mujeres que ocupan cargos importantes en Vertiv para que nos expusieran sus opiniones sobre lo que les inspira como mujer, qué las atrajo en el mundo de la tecnología, los retos a los que se enfrentan y lo que les aconsejan a la nueva generación. He aquí lo que nos dijeron. |
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Saida Ortiz Del mundo tecnológico me atrae la rapidez de los cambios, la posibilidad de aprender diariamente, y las soluciones que resultan por la aplicación de creatividad, desarrollo, algoritmos y/o aplicaciones de hardware o software que al final lo que buscan es mejorar la calidad de vida del ser humano. El mayor reto fue ser Psicóloga y llegar a dirigir equipos del mundo tecnológico, tanto en Colombia como en otros países de Europa y Latinoamérica. Por supuesto, para ser más competitiva tuve que desarrollar estudios en Ingeniería de software y energías renovables, los cuales han permitido el desarrollo de mi carrera de manera más efectiva. En ocasiones los estigmas tanto de género, profesión, etnia u otros tantos suelen ser barreras difíciles (pero no imposibles) de superar. Para ello, por supuesto, siempre existen caminos a través de la formación, la experiencia, la confianza de otros, que ayudan a asumir dichos retos y a demostrar de lo que se es capaz sin importar ningún tipo de restricción o paradigma. A las mujeres jóvenes les diría que piensen en términos de equidad y capacidad. Tenemos las mismas posibilidades de éxito que los hombres. Es importante aprovechar la coyuntura actual, en la cual la sensibilidad a la diversidad nos permite colocarnos un poco mejor y por otro lado hace que muchas voces evidencien la necesidad de la simetría y equidad en el espacio profesional y social. Yahaira Machicao Como mujer, y más importante aún como persona, lo que siempre me ha inspirado desde que tengo uso de razón, es proponerme metas y perseguirlas hasta alcanzarlas. Viendo en retrospectiva, en ese camino nunca me percaté si por ser mujer iba a tener mayores dificultades. Luego de estar cerca de 10 años en los rubros industrial y cosmético y estudiar un MBA en Europa, me sentía con muchas ganas de vivir nuevas experiencias saliendo de mi zona de confort; quiere decir, experimentar en rubros completamente ajenos a mí. Es así, que se me presentó la oportunidad unirme a Emerson (ahora Vertiv) pasando por el proceso de selección más largo y complejo que me tocó vivir hasta ahora y no dudé en unirme a este nuevo desafío por lo interesante y nuevo “mundo” que era para mí. Hace varios años cuando comencé a asumir cargos de responsabilidad, en algunas ocasiones me tocó lidiar con los prejuicios que se generan relacionados a la edad. Para sintetizar la manera en que abordé esto, me gustaría citar al Sr. Victor Kupper: La vida = (Conocimiento + Experiencia) x Actitud. Quiere decir que el conocimiento y la experiencia siempre suman, pero la actitud MULTIPLICA. Considero que la única diferencia entre un hombre y una mujer se basa en la fuerza física. Todas las otras diferencias que pudiesen existir, dependen de cada ser humano, indistintamente del sexo. Dicho esto, sólo cambiaría la perspectiva que se tiene sobre esta superioridad aparente de los hombres. Sin embargo, es cierto que la historia reprimió a la mujer; no porque esta tenga menores habilidades, sino porque simplemente la reprimieron y esto quedó como tendencia. Me gustaría extender mis consejos más allá del campo de la tecnología y de las mujeres. Lo que les diría a todos es: Ponte metas, “ten un Everest que escalar”, sigue tus sueños, cree en ti, comparte tus buenas y malas experiencias y no te rindas.
Magdalena Mardones Soy una persona que no dejo mi celular a un lado, para mí es como mi mano derecha. Desde el inicio de los smartphones siempre estuve muy actualizada con los celulares, los diferentes sistemas operativos y aplicaciones; esto me llevó a pensar un poco más allá de donde se almacena todo esto, la señal, latencia, entre otras cosas, y empecé a darme cuenta de que hay todo un mundo detrás como, por ejemplo, los centros de datos. Los empleos que antes tenía eran de Business Development & Marketing, pero en diferentes rubros, y salió una oportunidad en Vertiv. Sin tener experiencia en este campo de la tecnología me llamó mucho la atención, especialmente hacia donde se está dirigiendo el mundo. Postulé, quedé y no miré más atrás. Mi consejo a la nueva generación es que no se rindan, siempre den el máximo, no se subestimen y demuestren sus habilidades. Es un lindo y entretenido rubro para trabajar, uno nunca para de aprender, siempre hay nuevas tecnologías emergiendo.
Camila Velloso Ser parte de los cambios y tendencias del mundo fue lo que me atrajo para entrar en el mundo de la tecnología. Mi campo son las operaciones y como era una mujer joven creía que siempre debía ser la persona más fuerte de la sala para que me respetaran. Con el tiempo me di cuenta de que estaba en una trampa. No estaba siendo leal a mis creencias y solo estaba siguiendo un comportamiento que es común en mi posición. Cuando me di cuenta de esto, comencé a escucharme a mí misma y a usar diferentes técnicas para superar los objetivos y modernizar la operación. En mi opinión, ser un buen profesional (masculino o femenino) no se trata de sentir, se trata de lograr resultados.
Verónica Ortega Como mujer me inspiran las historias de todo tipo. Las que encuentro en los libros, en las películas, las que se escuchan de voz en voz acerca de hombres y mujeres que hacen una diferencia para con la gente que los rodea, las historias que me cuentan mis hijos y que me hacen maravillarme ante la falta de prejuicios y miedos con los que pueden ver la vida. Me inspira mucho también aprender cosas nuevas que a veces no tienen mucha relación con mi carrera profesional, como aprender programación o tomar un taller de literatura. Sin duda alguna, el reto más grande ha sido tratar de empatar el deseo de crecer profesionalmente haciendo un trabajo relevante, con el deseo de formar una familia. Pienso que esta no es una situación que se resuelva de una sola vez y se quede así para siempre, es un proceso de adaptación permanente y algunas de las cosas que me han funcionado podrían ser estas:
Yadira Suárez Le aconsejaría a las jóvenes que no se detengan por los estereotipos. Si es algo que les apasiona y creen que pueden hacerlo, que lo hagan. Muchas veces me he dicho a mí misma: “¿Es esto algo qué puedo hacer? No lo sé, ¡solo inténtalo! Y cada vez que lo intento, me doy cuenta de que se puede hacer cualquier cosa. Es una cuestión de tiempo, esfuerzo y actitud”. Que salgan de su zona de confort y experimenten cosas nuevas. No tengan miedo de tomar riesgos. No tienen que tener todo resuelto antes de dar el primer paso hacia los sueños. Confiar en su intuición, creer en sí mismas, en las capacidades, y aprovechar las oportunidades que se les presenten. Otro de mis consejos es pensar outside the box, para traer nuevas ideas a la mesa. Si no funcionan, intentarlo una y otra vez. En este mundo ágil, la innovación es bienvenida y el fracaso es aceptado. Además, construir una red. Cuantas más personas conozcan, más se aprende y mayor exposición se obtiene. Es posible que encuentren a ese patrocinador que pueda ayudarlas a construir su carrera, o hacer grandes amigos para toda la vida. Ayudar a otros. Nunca estén demasiado ocupadas para ayudar a los colegas. Ayudar a los demás es una manera de ayudarse a sí mismo. Por: Redacción VERTIV. |
